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Aprende con un fideicomiso ejemplo la importancia de este tipo de contrato

Si vamos a hablar sobre un fideicomiso ejemplo, debemos enfocar nuestra atención en el objetivo de este tipo de contrato, que se constituye como un sello de confianza en todo negocio, pues, se establecen condiciones específicas a corto, mediano y largo plazo y se ratifican instrucciones de carácter irrevocable.

El fideicomiso es un acto jurídico y de confianza en el que una persona entrega a otra la titularidad de unos activos para que esta los administre en beneficio de un tercero.

En Latinoamérica, el fideicomiso se configura como una figura usada cada vez más para garantizar la entrega de una herencia, respaldar el pago de deudas u obtener una determinada rentabilidad con la administración de un bien. Y en las cooperativas, se constituye como una fuente de fondeo para el otorgamiento de líneas de crédito, teniendo en cuenta que no es un instrumento muy costoso y que permite mejorar el descalce de plazos por tomar depósitos a 30 o 45 días.

En el caso particular de las cooperativas que se conviertan en cajas de crédito, el estar bajo el modelo del fideicomiso mejora las posibilidades de captar depósitos y securitizar sus carteras de préstamos, puesto que se vuelven más confiables para los inversores.

Partes intervinientes

Este tipo de contrato, se constituye como una obligación compuesta que está dividida en cuatro partes intervinientes:

  1. Fiduciante o fideicomitente: se trata de la persona que constituye el fideicomiso, transmitiendo la propiedad del bien o de los bienes al fiduciario para que cumpla la finalidad específica del fideicomiso.
  2. Fiduciario: es la persona de confianza a quien el fiduciario encomienda algún encargo reservado constituido en bienes, para administrarlos y dar cumplimiento a la finalidad encomendada.
  3. Beneficiario: pueden ser una o más personas jurídicas o naturales en cuyo favor se ejerce la administración de los bienes fideicomitidos y en quienes ejerce la responsabilidad, en caso de que el beneficiario no llegara a existir, no aceptara o renunciara.
  4. Fideicomisario: es quien recibe los bienes fideicomitidos una vez extinguido el fideicomiso por cumplimiento del plazo o la condición. Es importante saber que esta persona será quien en definitiva reciba para sí los bienes en última instancia, una vez concluido el fideicomiso.

Entre las personas que integran un contrato de fideicomiso, estos se pueden clasificar como lo siguiente:

– Partes necesarias

El fiduciante: quien transmite los bienes.

El fiduciario: quien recibe y adquiere los bienes en propiedad fiduciaria.

– Terceros interesados

El beneficiario: quien recibe los beneficios del fideicomiso.

El fideicomisario: quien figura como destinatario final de los bienes fideicomitidos.

Pasos para estructurar un fideicomiso

Para estructurar un fideicomiso, se debe tener en cuenta la naturaleza del negocio que se quiere establecer, por lo cual a continuación te presentamos los pasos para estructura este tipo de contrato, una vez identifiques la necesidad y el fin específico respecto a un bien:

  1. El primer paso que deberá realizar es identificar la finalidad que vas a poner en marcha, así como seleccionar los bienes y recursos que permitirán lograrlo.
  2. En segundo lugar, deberá seleccionar a la persona que fungirá como beneficiario y que se encargará de proteger los activos de los acreedores. Recuerda que pueden ser personas cercanas, familiares, así como una empresa, fundación o institución sin ánimo de lucro.
  3. Aquí deberá elegir la entidad fiduciaria que se encargará de la administración del fideicomiso.
  4. En este punto, tendrá que pactar con la entidad fiduciaria la finalidad del fideicomiso, las condiciones pertinentes y el tiempo de vigencia, teniendo en cuenta que el fiduciario cobrará una remuneración por esa gestión.
  5. Finalmente, procederá a la firma del contrato de fideicomiso para precisar los participantes en el contrato y la debida transferencia de los activos a este patrimonio autónomo.

Tipos de fideicomiso

Una vez el fideicomitente transfiere el bien, se crea un patrimonio autónomo cuyo objetivo puede estar determinado por los diferentes tipos de fideicomisos o contratos fiduciarios existentes:

– Fiducia en garantía: es el usado para saldar deudas evitando pasar por procesos judiciales. En este tipo, el fideicomitente entrega sus bienes como garantía de pago de una determinada obligación para acceder a nuevos plazos u otros beneficios acordados con el acreedor. En caso de que la deuda no pueda ser asumida de ninguna forma por el fideicomitente, el acreedor podrá solicitar al fiduciario que realice la venta del inmueble entregado al fideicomiso para saldar la obligación, con el propósito de saldar la mora.

– Fiducia de administración: es la utilizada para transferir al fiduciario determinados bienes o recursos para que este último los conserve, administre y/o transfiera a un tercero. Esta figura es muy útil y utilizada para hacer cumplir el testamento de una persona, asegurar el futuro económico de su cónyuge, hijos, familiares o terceros, así como para la planificación patrimonial.

– Fiducia de inversión: aquí, el fideicomitente otorga recursos o valores para que el fiduciario los utilice en operaciones económicas que deriven en un mínimo de rentabilidad que fue pactado previamente.

Ventajas del Fideicomiso

Una vez establecido el tipo de fideicomiso y las cláusulas del contrato, se obtienen algunas ventajas que suelen aplicar para todos o a la mayoría de los contratos de fideicomiso, entre las que figuran los siguientes:

  • Los bienes administrados son completamente inembargables.
  • Reduce el riesgo de los negocios porque se constituye un patrimonio distinto al del fiduciante, fiduciario y al beneficiario.
  • Ofrece transparencia en el manejo de los fondos.
  • Promueve y fortalece acuerdos societarios.
  • Elimina el proceso judicial de ejecución y, por ende, las demoras y los altos costos que lo caracterizan.
  • Mejora la calidad crediticia, posibilitando la baja del costo de endeudamiento.
  • Para ofrecer garantías en el proceso, el fiduciario deberá rendir cuentas y sus actos gozan de tutela especial.

Los fideicomisos ya fueron ampliamente probados por cadenas de consumo masivo, bancos y cooperativas como herramienta de fondeo en la poscrisis, por lo que figuran como herramientas importantes para las líneas de crédito y el descalce de plazos para la toma de depósitos.

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Acerca de COLAC

La Confederación Latinoamericana de Cooperativas de Ahorro y Crédito (COLAC) es un organismo internacional de desarrollo cooperativo creado el 28 de agosto de 1970, que surge con el firme propósito de velar por el fortalecimiento del sector cooperativo de ahorro y crédito latinoamericano…

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